ORGANIZACIÓN DEL ESPACIO DE LA CLASE
Para entender el impacto del entorno físico en el gobierno de la clase, hay que hallarse familiarizado con dos formas básicas de organizar el espacio: aulas organizadas por territorio y aulas organizadas por funciones.
Para entender el impacto del entorno físico en el gobierno de la clase, hay que hallarse familiarizado con dos formas básicas de organizar el espacio: aulas organizadas por territorio y aulas organizadas por funciones.
Aulas organizadas por funciones.
En esta disposición, el espacio queda dividido en áreas de interés o centros de trabajo, que contienen los materiales del currículo para cada asignatura específica, sus orientaciones de actividades y las superficies de trabajo. Todo el mundo tiene acceso a todas las áreas. Este tipo de disposición es la más indicada en situaciones en que pequeños grupos de alumnos trabajan simultáneamente en una variedad de actividades. Por ejemplo, si el aula corresponde a la enseñanza básica se pueden establecer áreas de interés por la lectura, los trabajos manuales, las ciencias y las matemáticas. También se pueden organizar áreas para actividades audiovisuales, instrucción en pequeños grupos, estudio en silencio y proyectos para alumnos mayores.
Este tipo de disposición espacial es ideal para la atención a la diversidad.
Debemos tener en cuenta lo siguiente:
- la situación de puertas, ventanas, tomas de corriente. No se podrá colocar el aparato audiovisual, lupa, etc., en un rincón donde no haya enchufe.
- El material ha de ser accesible. Debe contar con un sitio propio claramente delimitado y ha de ser fácil llegar hasta allí.
- Los alumnos necesitan para el empleo del equipo superficies despejadas y convenientes.
- Las áreas de trabajo deben quedar aisladas por zonas tranquilas. Las mesas o las áreas de trabajo no deben hallarse en los lugares de paso. No se debe cruzar un área para dirigirse a otra.
- La supervisión de cada área ha de ser fácil. El profesor debe ver sin dificultad todas las áreas.
- Evitar los espacios muertos y "las pistas". Comprobar que no se ha colocado todas las áreas de interés en la periferia, dejando un amplio espacio en el centro, con lo que se crearía una "pista" que estimularía el correr y el alboroto.
- Proporcionar opciones. Los diferentes alumnos tienen diferentes necesidades espaciales. Algunos prefieren espacios reducidos y cerrados en los que trabajar mientras que a otros esos espacios les parecen limitados.
- Proporcionar flexibilidad. En ocasiones, el profesor deseará que sus alumnos trabajen solos, en pequeños grupos o formando grandes equipos.
Como profesores sólo nos queda decidir qué actividades deseamos disponer en el aula, elegir el plan que parezca más conveniente y disponer el aula en consecuencia:
- ensayar la nueva disposición.
- evaluar y hacer cambios.
- luego ensayar de nuevo hasta que todo esté a plena satisfacción.
En esta disposición, el espacio queda dividido en áreas de interés o centros de trabajo, que contienen los materiales del currículo para cada asignatura específica, sus orientaciones de actividades y las superficies de trabajo. Todo el mundo tiene acceso a todas las áreas. Este tipo de disposición es la más indicada en situaciones en que pequeños grupos de alumnos trabajan simultáneamente en una variedad de actividades. Por ejemplo, si el aula corresponde a la enseñanza básica se pueden establecer áreas de interés por la lectura, los trabajos manuales, las ciencias y las matemáticas. También se pueden organizar áreas para actividades audiovisuales, instrucción en pequeños grupos, estudio en silencio y proyectos para alumnos mayores.
Este tipo de disposición espacial es ideal para la atención a la diversidad.
Debemos tener en cuenta lo siguiente:
- la situación de puertas, ventanas, tomas de corriente. No se podrá colocar el aparato audiovisual, lupa, etc., en un rincón donde no haya enchufe.
- El material ha de ser accesible. Debe contar con un sitio propio claramente delimitado y ha de ser fácil llegar hasta allí.
- Los alumnos necesitan para el empleo del equipo superficies despejadas y convenientes.
- Las áreas de trabajo deben quedar aisladas por zonas tranquilas. Las mesas o las áreas de trabajo no deben hallarse en los lugares de paso. No se debe cruzar un área para dirigirse a otra.
- La supervisión de cada área ha de ser fácil. El profesor debe ver sin dificultad todas las áreas.
- Evitar los espacios muertos y "las pistas". Comprobar que no se ha colocado todas las áreas de interés en la periferia, dejando un amplio espacio en el centro, con lo que se crearía una "pista" que estimularía el correr y el alboroto.
- Proporcionar opciones. Los diferentes alumnos tienen diferentes necesidades espaciales. Algunos prefieren espacios reducidos y cerrados en los que trabajar mientras que a otros esos espacios les parecen limitados.
- Proporcionar flexibilidad. En ocasiones, el profesor deseará que sus alumnos trabajen solos, en pequeños grupos o formando grandes equipos.
Como profesores sólo nos queda decidir qué actividades deseamos disponer en el aula, elegir el plan que parezca más conveniente y disponer el aula en consecuencia:
- ensayar la nueva disposición.
- evaluar y hacer cambios.
- luego ensayar de nuevo hasta que todo esté a plena satisfacción.
Aulas organizadas por territorio.
En la mayoría de las aulas tradicionales, la mesa de un alumno es un territorio inviolable. El principio espacial subyacente en este tipo de disposición del aula es el de la territorialidad. El espacio es dividido en territorios individuales que pertenecen a sus propietarios, al menos hasta que el profesor cambie a todo el mundo de sitio. Este tipo de organización resulta especialmente adecuada para las lecciones dirigidas simultáneamente al conjunto de la clase.
Cuando se asignan mesas a los alumnos es porque se espera que se mantengan en esos lugares, en especial si las mesas están dispuestas en filas. En un aula así, la mayor parte de la actividad que vaya a tener lugar podrá ser clasificada como de "interacción verbal". Hay veces en que la disposición más conveniente es la constituida por filas rectas. Los profesores con una gran necesidad de control prefieren una disposición de los asientos en la que ellos resulten claramente dominantes. Por otro lado, demasiados profesores que no sienten especialmente esa necesidad de un elevado control, emplean esta disposición, aunque resulte inadecuada, sencillamente porque les es familiar.
Disposiciones alternativas.
Estas dos maneras de organizar el espacio no se excluyen entre sí. Muchos profesores emplean un diseño que combina los dos tipos de disposiciones, es decir, mesas individuales en el centro con áreas de interés en la parte trasera o en la periferia del aula. Vamos a examinar unas cuantas disposiciones alternativas. Podemos distinguir:
Formaciones estables
Son disposiciones espaciales semipermanentes, adecuadas para una amplia gama de situaciones de enseñanza-aprendizaje.
- Líneas horizontales: comparte con la de filas y líneas tradicionales el que ambas resultan útiles para el trabajo independiente del alumno en su sitio, para las explicaciones y las preguntas y respuestas, estimulan a los alumnos a concentrarse en el profesor. Las filas horizontales permiten una pequeña dosis de interacción entre vecinos, por lo que los alumnos podrán trabajar con mayor facilidad emparejados. Esta formación es también la más adecuada para las explicaciones puesto que los alumnos se hallan muy próximos y a la vista del profesor. Sin embargo, no resulta conveniente si un profesor pretende estimular la interacción de los alumnos.
- Grupos de cuatro: Son las disposiciones espaciales más adecuadas para la interacción de los alumnos, para trabajar en equipo, trabajos cooperativos, tutorización por un compañero o grupo, heteroevaluación, etc. Hace posible que un alumno hable con otro, que se ayuden, que compartan materiales y trabajen en tareas comunes al grupo, fomentando al tiempo muchos valores prosociales. Sin embargo, esta disposición no es adecuada cuando se trata de explicar algo al conjunto de la clase y puede hacer más difícil el control de ésta.
Formaciones especiales
Que proporcionan la variedad necesaria y son las más convenientes en un determinado momento.
- Formación en bloque: los alumnos se sientan muy juntos, próximos al foco de atención, sólo deberá ser utilizada durante breves periodos de tiempo, ya que puede ser origen de problemas de disciplina. Por otro lado, puede crear un sentimiento de cohesión y es útil en situaciones en las que el profesor quiere que los alumnos sigan una demostración, intervengan activamente en la resolución de un problema o contemplen una proyección.
- Debate de toda la clase: en esta disposición espacial puede haber dos variantes, en círculo o en herradura. Ambos son útiles para los debates en clase al tiempo que permiten que los estudiantes trabajen independientemente en sus asientos.
- Puntos de interés: se distribuyen las mesas y alumnos, generalmente en 4 grupos, donde se trata un tema diferente en cada uno.
LA TIPOLOGÍA DEL ESPACIO EN EL DESARROLLO DEL NIÑO
Uno de los factores que configuran nuestra personalidad es el espacio.Junto con el tiempo forma las coordenadas existenciales sobre las que sesienta la vida del hombre.
El espacio es tridimensional, tiene cosas, va armándose de objetos. Tienefondos, planos y perspectivas. También tiene movimiento. Somos seresespaciales. ¿De dónde han salido las tres dimensiones? Surgen de los tresejes que atraviesan al hombre, dando lugar a sus seis polos de referencia.Estas dimensiones capitales no son intercambiables, y forman el «espaciopropio>».
El hombre es un ser espacial que vive inmerso en lugares físicos,psíquicos y sociales.
2.1. Espacios de carácter físico
El espacio fetal: Es el primer receptáculo en que se mueve el ser humano.Qué duda cabe que puede resultar cómodo o incómodo en unos uotros casos. A veces, hay que compartir ese espacio con otra u otras personas.Todo es diferente y en cada caso el individuo recibe unas influenciasdeterminadas.Las condiciones ambientales son decisivas en este caso. Y también lasde carácter mecánico que facilitan al nuevo ser o una vivienda inhóspita oun lugar de tranquilidad y Sosiego.
El espacio del lactante: El regazo es importante no sólo en el aspecto físicosino en el afectivo.del espacio en el desarrollo del niño
Uno de los factores que configuran nuestra personalidad es el espacio.
Los espacios domésticos: La casa tiene una gran importancia ya que enella transcurren muchas horas y, pon otra parte, se trata de horas de grantranscendencia emocional, el niño ha tomado posiciones en el espacio, semueve de un lugar a otro de forma consciente, se relaciona con las cosas de
El espacio escolar:
Una forma activa y orientada, y adquiere nociones de tipo espacial, construyendosus mapas y llegando a la categoría del espacio en el pensamiento.
El espacio motriz: Es el limite de nuestro campo práxico o deambularocio.Primordialmente, el niño tenia un espacio oral(primera zona en eldesarrollo de la conciencia del espacio), relativa a las sensaciones y los movimientosde la boca.
El espacio de tipo psicológico: Existe otro tipo de espacio no circunscritoradicalmente al espacio físico, aunque esté directamente vinculado aél. Es un mecanismo de feed-back interminable el individuo crea estos espaciospeculiares, que a su vez reobran sobre su propio modo de ser.
El espacio sensorial: Llegamos hasta donde alcanzan nuestra sentidos.El espacio es conquistado psíquicamente de manera distinta por cada especie.
El espacio afectivo: Llamamos el espacio afectivo al alcance emocionalentre una persona y otra u otras.El espacio afectivo supone la existencia de carga emocional que puede
tener dos polos: cordialidad y hostilidad. El espacio estará marcado por laintensidad y los límites de esa carga afectiva. Constantemente manejamosnuestro espacio emocional y afectivo, de manera inconsciente las más delas veces.
Existen distancias óptimas para la relación, según la intensidad y el tipode nexo afectivo que une a las personas.
El espacio escolar ha de adaptarse a las distintas etapas evolutivas delos alumnos, a las agrupaciones que por este motivo se realicen, a los objetivosespecíficos que en cada una de ellas pretendan conseguir los alumnos y a la interrelación entre éstos.
En la mayoría de las aulas tradicionales, la mesa de un alumno es un territorio inviolable. El principio espacial subyacente en este tipo de disposición del aula es el de la territorialidad. El espacio es dividido en territorios individuales que pertenecen a sus propietarios, al menos hasta que el profesor cambie a todo el mundo de sitio. Este tipo de organización resulta especialmente adecuada para las lecciones dirigidas simultáneamente al conjunto de la clase.
Cuando se asignan mesas a los alumnos es porque se espera que se mantengan en esos lugares, en especial si las mesas están dispuestas en filas. En un aula así, la mayor parte de la actividad que vaya a tener lugar podrá ser clasificada como de "interacción verbal". Hay veces en que la disposición más conveniente es la constituida por filas rectas. Los profesores con una gran necesidad de control prefieren una disposición de los asientos en la que ellos resulten claramente dominantes. Por otro lado, demasiados profesores que no sienten especialmente esa necesidad de un elevado control, emplean esta disposición, aunque resulte inadecuada, sencillamente porque les es familiar.
Disposiciones alternativas.
Estas dos maneras de organizar el espacio no se excluyen entre sí. Muchos profesores emplean un diseño que combina los dos tipos de disposiciones, es decir, mesas individuales en el centro con áreas de interés en la parte trasera o en la periferia del aula. Vamos a examinar unas cuantas disposiciones alternativas. Podemos distinguir:
Formaciones estables
Son disposiciones espaciales semipermanentes, adecuadas para una amplia gama de situaciones de enseñanza-aprendizaje.
- Líneas horizontales: comparte con la de filas y líneas tradicionales el que ambas resultan útiles para el trabajo independiente del alumno en su sitio, para las explicaciones y las preguntas y respuestas, estimulan a los alumnos a concentrarse en el profesor. Las filas horizontales permiten una pequeña dosis de interacción entre vecinos, por lo que los alumnos podrán trabajar con mayor facilidad emparejados. Esta formación es también la más adecuada para las explicaciones puesto que los alumnos se hallan muy próximos y a la vista del profesor. Sin embargo, no resulta conveniente si un profesor pretende estimular la interacción de los alumnos.
- Grupos de cuatro: Son las disposiciones espaciales más adecuadas para la interacción de los alumnos, para trabajar en equipo, trabajos cooperativos, tutorización por un compañero o grupo, heteroevaluación, etc. Hace posible que un alumno hable con otro, que se ayuden, que compartan materiales y trabajen en tareas comunes al grupo, fomentando al tiempo muchos valores prosociales. Sin embargo, esta disposición no es adecuada cuando se trata de explicar algo al conjunto de la clase y puede hacer más difícil el control de ésta.
Formaciones especiales
Que proporcionan la variedad necesaria y son las más convenientes en un determinado momento.
- Formación en bloque: los alumnos se sientan muy juntos, próximos al foco de atención, sólo deberá ser utilizada durante breves periodos de tiempo, ya que puede ser origen de problemas de disciplina. Por otro lado, puede crear un sentimiento de cohesión y es útil en situaciones en las que el profesor quiere que los alumnos sigan una demostración, intervengan activamente en la resolución de un problema o contemplen una proyección.
- Debate de toda la clase: en esta disposición espacial puede haber dos variantes, en círculo o en herradura. Ambos son útiles para los debates en clase al tiempo que permiten que los estudiantes trabajen independientemente en sus asientos.
- Puntos de interés: se distribuyen las mesas y alumnos, generalmente en 4 grupos, donde se trata un tema diferente en cada uno.
LA TIPOLOGÍA DEL ESPACIO EN EL DESARROLLO DEL NIÑO
Uno de los factores que configuran nuestra personalidad es el espacio.Junto con el tiempo forma las coordenadas existenciales sobre las que sesienta la vida del hombre.
El espacio es tridimensional, tiene cosas, va armándose de objetos. Tienefondos, planos y perspectivas. También tiene movimiento. Somos seresespaciales. ¿De dónde han salido las tres dimensiones? Surgen de los tresejes que atraviesan al hombre, dando lugar a sus seis polos de referencia.Estas dimensiones capitales no son intercambiables, y forman el «espaciopropio>».
El hombre es un ser espacial que vive inmerso en lugares físicos,psíquicos y sociales.
2.1. Espacios de carácter físico
El espacio fetal: Es el primer receptáculo en que se mueve el ser humano.Qué duda cabe que puede resultar cómodo o incómodo en unos uotros casos. A veces, hay que compartir ese espacio con otra u otras personas.Todo es diferente y en cada caso el individuo recibe unas influenciasdeterminadas.Las condiciones ambientales son decisivas en este caso. Y también lasde carácter mecánico que facilitan al nuevo ser o una vivienda inhóspita oun lugar de tranquilidad y Sosiego.
El espacio del lactante: El regazo es importante no sólo en el aspecto físicosino en el afectivo.del espacio en el desarrollo del niño
Uno de los factores que configuran nuestra personalidad es el espacio.
Los espacios domésticos: La casa tiene una gran importancia ya que enella transcurren muchas horas y, pon otra parte, se trata de horas de grantranscendencia emocional, el niño ha tomado posiciones en el espacio, semueve de un lugar a otro de forma consciente, se relaciona con las cosas de
El espacio escolar:
Una forma activa y orientada, y adquiere nociones de tipo espacial, construyendosus mapas y llegando a la categoría del espacio en el pensamiento.
El espacio motriz: Es el limite de nuestro campo práxico o deambularocio.Primordialmente, el niño tenia un espacio oral(primera zona en eldesarrollo de la conciencia del espacio), relativa a las sensaciones y los movimientosde la boca.
El espacio de tipo psicológico: Existe otro tipo de espacio no circunscritoradicalmente al espacio físico, aunque esté directamente vinculado aél. Es un mecanismo de feed-back interminable el individuo crea estos espaciospeculiares, que a su vez reobran sobre su propio modo de ser.
El espacio sensorial: Llegamos hasta donde alcanzan nuestra sentidos.El espacio es conquistado psíquicamente de manera distinta por cada especie.
El espacio afectivo: Llamamos el espacio afectivo al alcance emocionalentre una persona y otra u otras.El espacio afectivo supone la existencia de carga emocional que puede
tener dos polos: cordialidad y hostilidad. El espacio estará marcado por laintensidad y los límites de esa carga afectiva. Constantemente manejamosnuestro espacio emocional y afectivo, de manera inconsciente las más delas veces.
Existen distancias óptimas para la relación, según la intensidad y el tipode nexo afectivo que une a las personas.
El espacio escolar ha de adaptarse a las distintas etapas evolutivas delos alumnos, a las agrupaciones que por este motivo se realicen, a los objetivosespecíficos que en cada una de ellas pretendan conseguir los alumnos y a la interrelación entre éstos.
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